Los escolares de Torrelodones participarán mañana en un pleno infantil para hablar de ecología, medio ambiente y participación, entre otros.

Mañana miércoles 20 de noviembre, fecha en la que se celebra el “Día universal del niño”, los escolares de Torrelodones tomarán la palabra en el salón de plenos.

Alumnos de 5º curso de Educación Primaria de cinco colegios de la localidad (CEIPSO El Encinar, CEIP Nuestra Señora de Lourdes, CEIP Los Ángeles y los colegios concertados San Ignacio de Loyola y Peñalar) participarán en esta convocatoria.

El acto dará comienzo a las 10:00h de la mañana y tiene estimada una duración de dos horas. Veinte escolares de Torrelodones, previamente elegidos por sus compañeros, ocuparán los asientos utilizados habitualmente por los concejales durante los plenos municipales.

Los chicos realizarán propuestas y sugerencias dirigidas a mejorar la calidad de vida y los servicios de Torrelodones. Para ello, tendrán que argumentar y defender sus propuestas, que posteriormente deberán ser votadas por estos eventuales concejales.

Ecología, sostenibilidad y participación

La dinámica del pleno infantil la dirigirá el alcalde de la localidad, Alfredo García-Plata, que podrá ir dando paso a distintos concejales en función de los temas que planteen los estudiantes.

Además, el alcalde recordará los puntos aprobados en el pleno infantil de 2018 y realizará un balance sobre el cumplimiento de los mismos. En esta ocasión, los temas sobre los que centrarán las propuestas serán ecología, medio ambiente, sostenibilidad y participación.

Foro de la infancia

Para finalizar, dos niños pertenecientes al Foro de la infancia explicarán en qué consiste y expondrán los trabajos realizados. El Foro de la infancia está funcionando en los colegios Los Ángeles y Lourdes.

Finalizado el Pleno los 21 alumnos firmarán el acta recogida con los puntos aprobados.

Ciudad Amiga de la Infancia

Hay que recordar que, desde 2016, Torrelodones cuenta con el sello de Unicef que la reconoce como Ciudad Amiga de la Infancia. El reconocimiento -que debe renovarse en 2020- se otorga tras un proceso de evaluación a los municipios e instituciones que se presentan a la convocatoria del programa.

De esta forma se analiza qué las líneas de actuación de la política pública diseñada en relación a la infancia y la adolescencia se ajusten a los requisitos exigidos. Este proceso conlleva la visita de una comisión evaluadora de UNICEF para conocer de primera mano las experiencias desarrolladas en materia de participación infantil y derechos de la infancia.