En este número del periódico nos hacemos eco de dos buenas iniciativas que tienen mucho que ver con adicciones en jóvenes.
En Torrelodones, Pedro García Aguado, el medallista olímpico conocido por el público tras su paso por el programa Hermano Mayor, mostró durante una jornada -primero a los jóvenes y después a los padres- los problemas de las adicciones y cómo prevenirlos.
En páginas interiores publicamos una entrevista con este embajador del programa FES (Formación, Educación y Sensibilización), que se centra en las adicciones comportamentales.
Prevenirlo entre los jóvenes es una tarea que compete a los adultos; sin embargo, mal ejemplo damos a nuestros hijos cuando los primeros que abusamos del móvil y de las nuevas tecnologías somos los mayores.
Buena iniciativa la de Las Rozas, con su proyecto pionero de instalar taquillas en los centros educativos para que los alumnos depositen allí sus móviles antes de la entrada a clase.
Según un estudio de la OCU, un 25% de los españoles entre 18 y 64 años muestra síntomas de estar enganchado a internet y un 26% reconoce que su vida personal depende bastante del móvil.
Las cifras son alarmantes si miramos las horas. De media, unas 33 horas a la semana enganchados al móvil.
Estas cifras crecen exponencialmente entre los políticos. No sin mi foto es su máxima. No venden su gestión sino su imagen porque es lo que importa.
Los plenos de los ayuntamientos se han convertido en una batalla para ver quién coloca la primera ocurrencia en sus redes. No importa si lo que se ha aprobado es beneficioso para su municipio. Y en este atropello por llegar el primero a las redes te encuentras desde faltas de ortografía hasta frases inconexas y sin sentido. Un ejemplo, el artículo que escribí el pasado mes en estas mismas páginas no gustó al concejal socialista de Torrelodones. Lo lamento profundamente y más lamento que nos hallamos convertido en el centro de su acción política. Imagino que sigue las máximas de sus jefes que han pedido amparo a las asociaciones de periodistas “para la retirada de credenciales de prensa” a algunos medios. Se me ocurre que tal vez los árboles no le dejan ver el bosque.
Sin embargo, he de corregir al ínclito socialista por el atropello en el tuit que nos dedicó. Cito textualmente: “¿Mucho resentimiento en esta editorial no? Qué hay detrás de esta historia de desamor VxT-La Voz de la A6?” Y terminaba su ingenioso comentario con un corazón roto. Pues, permítame el lector que le conteste al señor Bernal para que se centre: en primer lugar, este es un artículo y no un editorial. La diferencia es clara: este artículo va firmado y un editorial no. Le añado que “la editorial” (en femenino) es una empresa y “el editorial” (masculino) es un género periodístico, un artículo que no va firmado. Y más: no puede haber “desamor” donde nunca hubo amor. A tenor de su pregunta, el concejal socialista lleva 12 años ausente de Torrelodones. Y otro apunte: en castellano se escribe signo de interrogación antes y después de la frase.
La crispación política que intentan trasmitir a la sociedad, creo, está íntimamente relacionada con el abuso de internet y el móvil. De acuerdo con el citado estudio de la OCU, “a mayor uso de redes sociales, menor satisfacción con la vida”. Seamos un ejemplo para nuestros hijos: menos móvil y más cultura.
Miguel Ángel Estalayo
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