A un erudito castellano le preguntaron una vez qué haría si fuese alcalde por un día. Sin pensarlo, dijo: “Poner las raíces de los árboles hacia arriba”. Ante la extrañeza de su respuesta, añadió: “Así todos sabrían que soy el alcalde”. Esto mismo es lo que debe pensar el de Torrelodones. Contra la opinión de los vecinos (en pocos días han recogido más de 1.000 firmas en La Colonia) ha decidido llevarse el cuartel de la Guardia Civil a Los Bomberos y dejar desprotegida a gran parte de la población, sobre todo, en un municipio como Torrelodones donde se incrementa la inseguridad por la falta de efectivos. Solo 32 policías para 25.000 habitantes; 20 menos que en el año 2005. El caos en la concejalía de seguridad es tal que hay noches con una sola patrulla y los policías se limitan a dar cobertura a los avisos urgentes. En la Cabalgata de Reyes solo hubo un agente. Como publicamos en nuestra web, hay coches de policía con 10 años de antigüedad circulando sin haber pasado la ITV. También de espaldas a los vecinos el proyecto que recuperaron de un cajón, tras haberlo denostado los anteriores Vecinos por Torrelodones (esos con los que ahora no se hablan): dejar de una sola dirección una de las avenidas más importantes y con más tráfico de La Colonia. Si caótica es la concejalía de seguridad más aún es la de personal. La mala gestión en el contrato del servicio de limpieza ha dejado en el limbo y sin cobrar desde agosto a 19 personas. Incluso el alcalde, sin informarles previamente, les prohibió el paso a las dependencias. Y no se queda atrás la de comunicación. Al salario del concejal se suma el del personal del Ayuntamiento, más una agencia de publicidad, otra catalana de comunicación, más la de la web y redes sociales. Total, para tener que rectificar las notas de prensa tras el patizano de las declaraciones del alcalde y la propia información municipal. Aseguraban que la nueva empresa del servicio de limpieza iba a abonar los sueldos de los trabajadores. Totalmente falso. Lo que García-Plata debe desconocer es que por la boca muere el pez. Al caso vienen sus declaraciones ante la falta de sal y el caos de Filomena cuando afirmó que les habían robado 20 toneladas de sal (todavía están buscando quién se las llevó al hombro) o que la gran nevada le había pillado durmiendo la siesta. De ahí el caos.

No le va a la zaga la alcaldesa de Collado Villalba. El Pleno del Ayuntamiento acaba de reprobarla por segunda vez. Especialmente duros los ataques del que todavía es su socio de gobierno: Ciudadanos. Este grupo y el PSOE afirmaron tajantemente que Vargas mintió cuando reveló que mientras estaba en la UCI habían intentado hacerle una moción de censura. “Políticamente repugnante y humanamente vil”; dijo el candidato socialista. Al parecer eran sus dos concejales del PP los que estaban intentando moverle el sillón. Claro que siempre hay quien está dispuesto a comprar y publicar cualquier declaración. “Mamporreros y mercenarios”, según el todavía primer teniente de alcalde.