ESTHER PARRA MERINO

Perspectiva del Pleno de Torrelodones

Perspectiva del Pleno de Torrelodones

Un 13 de enero más, en torno a las 20:00 horas… Una que sale tranquilamente de casa, como en tantas ocasiones, y se dispone a arrancar el coche para acercarse al súper. Llave, contacto, sonido del motor y zas!, se activa la radio. La emisora municipal de Torrelodones “barre”, como de costumbre, cualquier otra señal y zas!, reverbera altisonante en el habitáculo de mi vehículo un claro e inteligible “Es acojonante”. Ah, que aquí no se pueden poner caritas ni emoticonos. En este punto, sin duda, pondría la de asombro, esa sí, esa, la de coloretes con los ojos como platos.

Onda Torrelodones retransmitía en directo la sesión ordinaria de nuestro insigne Pleno municipal. El órgano de máxima representación política de los ciudadanos, sí, ese. A sus miembros, alcalde y concejales, les corresponde, entre otras atribuciones y competencias, debatir sobre las líneas de actuación o políticas locales de relevancia que afectan al municipio, la adopción de las decisiones estratégicas y el control/fiscalización de los órganos de gobierno. Y… alguien, en el transcurso de su intervención, espetó: “Es acojonante”. ¿Quién y por qué?, y lo más asombroso… ¿Qué hace en nuestra Cámara Municipal repanchingada, cual señorita del pan “pringao”, alguien que denosta, presuntamente claro, al Pleno, a sus compañeros de Corporación y, por ende, a todos los ciudadanos?. [Señorita del pan ‘pringao’: dícese  del personaje popular, prototipo de la apariencia vana. Suele aplicarse como epíteto despectivo a quienes, alardeando refinamiento, dejan traslucir a la menor ocasión su incultura y zafiedad. Frase completa que se utiliza habitualmente, de acuerdo con los usos y costumbres populares: La señorita del ‘pan pringao’ que metió la mano en el ‘guisao’. Definición recogida en la obra “Seres míticos y personajes fantásticos españoles”, de Manuel Martín Sánchez, muy acertada en el caso que nos ocupa, he de decir].

Y, ¿Quién es ese alguien o alguna, que desconoce lo que es el decoro institucional o las más básicas normas de respeto y cortesía, algo que se presupone a quienes representan a los vecinos y más si cabe como integrantes del Gobierno, que lo es para y de todos y no para y de los colegas que me votan?. Clara muestra esta propia de una conducta impropia que no sé cómo no le “rechina” a la regidora premium -verbo que suele utilizar reiterativamente y de un modo ampuloso y relinchón-, sin llamar al orden, ni moderar, ni dirigir la sesión… como para dirigir un Gobierno o la acción municipal… Otra forma de desgobierno es posible.

Y todo esto, como respuesta a las explicaciones solicitadas por uno de los portavoces de los grupos de oposición ante los robos y “desapariciones” misteriosas de unas carpas, creo recordar. Hurtos y objetos que se desintegran, desmaterializan y desvanecen en el limbo de la nave municipal. Ohhhh. Carita sorpresiva; varias caritas sorpresivas en hilera, sí, las de los coloretes con los ojos como platos. Y arremetiendo contra el Sr. Portavoz de la lista más votada, Dña. Sra. ‘Es Acojonante’, alias la Concejal Macarra, todavía se permite escupirle y expeler a bote pronto, sin pundonor ni anestesia (muy necesaria en su presencia) palabras tales como: “Igual usted los conoce (a los que roban)”. Más caritas. Acusación en toda regla, grave, gratuita y pestilente, acorde con la dicente, que es muy posible se corresponda con la ética, moral y deontología con la que soñaba en su más tierna infancia, porque Sras. y Sres. los niños no mienten.

Voy a consultar al equipo de Cuarto Milenio si son tan amables de investigar los fenómenos poltergeist que se suceden a diario en nuestra nave municipal, atendiendo a las palabras e interpretaciones de la abrupta edil que, a golpe de descoque, pierde el norte. Ahora bien, y rematando la faena, he de reconocer que pasé de esa carita a la de la carcajada con lágrimas -y muchas- cuando, siguiendo con el desarrollo del Orden del día del Pleno, otro concejal del desgobierno en el siguiente punto pronunció una frase que aún resuena en mi memoria: “Como responsable del área de actividad física espontánea”. JAJAJAJAJAJA, Mandeeeee???? Oí hablar alguna vez del fenómeno de combustión espontánea, eso sí. Quizá sea eso lo que ocurre en la nave o lo que afecta a las estructuras neuronales de algunos. Carita sonriente. Llegué al garaje, aparqué, apagué el motor y volví a la normalidad. Afortunadamente.