El 60% de la fauna atendida en el CRAS regresa a su hábitat natural
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, el consejero de Medio Ambiente, Pedro Rollán, el alcalde de Galapagar, Daniel Pérez Muñoz, y miembros de la Corporación han participado hoy en Galapagar en la puesta en libertad de un ejemplar joven de águila imperial ibérica, una de las rapaces más amenazadas del mundo, y en peligro de extinción, cuya presencia en la región se ha duplicado a lo largo de los últimos años.
Se trata de un ejemplar que ha pasado varias semanas en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) de la Comunidad de Madrid. De plumaje color pardo rojizo, la rapaz tiene siete meses de edad, pesa 3,5 kilogramos y mide 81 centímetros de altura y 2,10 metros de envergadura, con las alas desplegadas.
Cifuentes ha explicado que el águila llegó al Centro de Recuperación el pasado 20 de junio, tras caer de un nido en el municipio de Fresno de Torote y pasar varios días en el suelo hasta que fue rescatada por agentes forestales con síntomas de deshidratación. Su reintegración en el medio natural para que viva en libertad ha sido posible ya que en el CRAS, además de recuperar su estado físico, le han enseñado a volar y a cazar. Además de este ejemplar, se han soltado dos busardos ratoneros que también han sido cuidados en el CRAS.
Este centro ha atendido a 23.000 animales desde 2010, de los que el 60 % fueron reintegrados nuevamente en su entorno, lo que convierte a este Centro en el mayor y más avanzado hospital de fauna silvestre de España.
65 parejas de águilas censadas en la región
Cifuentes ha recordado que Madrid es la comunidad con mayor densidad de águila imperial ibérica por kilómetro cuadrado. En la actualidad habitan en la región más águilas imperiales que en periodos anteriores, con 65 parejas censadas, el doble que las localizadas en 2009 y casi el triple que en el año 2000. Esta cifra supone contar en la región con el 13% de la población mundial de esta especie.